domingo, 29 de junio de 2008

The bubble, the sex, the city and the girls

Yeah Baby... they're back.

República Dominicana: los días están contados para la reunión más divertida, sexy and of course, fashionista del súper original cuarteto amiguero que se presenta sobre tacones coquetos.

Preparen los Cosmopolitan y den forman a sus manos para aplaudir las próximas cercanas escenas de la pasarela newyorkina vivida por Carrie, Charlotte, Samantha & Miranda en los conjuntos de ropas más chulitos y fabulosos!! Yeih!! Yeih!! Yeih!!


viernes, 27 de junio de 2008

Burbujas from My Dear Diary:

Cuando alguien escribe - y me refiero a escribir desde el alma - lo hace por desahogo.

Muchas veces las personas confunden los motivos que inspiran a que sean las manos las encargadas de dar voz a los sentimientos.

En ocasiones, se percibe y hasta se engaña al intelecto de que se “debe” escribir esa meticulosa carta de amor para expresarle a tu pareja todo lo bueno que su risa infunde. A mi entender, cuando las ideas fluyen, sin fuerza o rima, sin razón o justificación, un capitulo destrozado de la historia busca ayuda en las palabras.

Creo que la diferencia entre escribir en un blog y en un “querido diario” yace en que aunque quizás algún día esas hojas de lágrimas y secretos sean descubiertas por terceros, sólo participan ustedes dos, un buen dúo, en el momento que esos oídos imaginarios son abiertos al sacramento impuro de confesión.

En referencia a la participación en una bitácora virtual, no se escribe para ti. Se escribe para los demás. Para compartir, para evaluar, para criticar, para juzgar, para odiar, para amar. Para un tanto que a veces puede ser tan poco.

Continuamente se presentan temas que interesan como ocio. Te sorprenden y te gustan. Otras veces discutes. Maldices situaciones globales que destruyen y/o afectan este pedacito de universo que pisamos.

A su vez, suele suceder que por circunstancias generales, presencias la mordida venenosa de un chisme y buscando mostrar tu comarca en el proceso, escribes. Puede ser de forma “anónima” – sin indicar los protagonistas - solo se exalta la bravucona frase del sombrero y su ajuste. Si el dolor es aún más profundo y el impulso maneja a los sentidos, el orgullo se alza y se manifiesta todo el enojo. Con nombres, apellidos, fotos y “mandatos” (algo así como vete por ahí…).

¡Cuantas formas de escribir! ¡Cuántos hechos por los que escribir!

A todas las amo. De todas creo que se debe de escribir. Creo que la más difícil situación de todo el menú temático - y me refiero en lo vivido por estas manos y corazón – descansa en aquellas circunstancias que significan tanto pero que sólo el interior entiende. Si se expresa, no sale como es y peor aún, avanza un paso más cerca a la tarima de la realidad. Cosas que no se hablan con todo el mundo, tanto porque no se sabe como explicarlas y porque no todos saben entenderlas.

Creo que en este momento escribí en el blog poniéndome primero a mi y después a los demás. Creo o más bien espero, que en ese enredo de palabras, puntos, oraciones y confusiones previo, algunos o quizás todos encuentren un anhelo de identificación, desahogo.

Creo que yo lo hice. Creo que hacía falta. Si parecen ideas sin sentidos, conclusiones subjetivas entonces mi misión fue cumplida. Expresé un desahogo extraído de los adentros, que para mi, conservan sentido.

Porque es que todos, de una manera u otra, resistimos capítulos tristes, antagónicos en las páginas del libro de nuestra historia.

martes, 24 de junio de 2008

Frase Burbujosa

The difference between fiction and reality is that fiction has to make sense.
Tom Clancy

lunes, 16 de junio de 2008

Alfireres de la educación

“Educar es desencadenar la gran riqueza que cada persona lleva dentro”.
Javier Cortés

Siendo fiel a su destino, realizó su formación sacerdotal bajo la instrucción de la Compañía de María, orden religiosa destacada por trabajar a favor de la educación y la pedagogía.

Conoce a la educación - aquella pieza instructiva que define como una cadena de expresión - desde su juventud. Juntos, disciplina y catedrático han formado en su tiempo, un pacto pedagógico personal en el que uno con el otro se permiten aprender y adiestrar.

Con estudios universitarios orientados a la filosofía, el reverendo Cortés ha ejercido variados cargos relacionados al contorno magistral. Profesor, orador y rector académico son tan sólo algunos de los roles por los cuales su persona es aplaudida. Sin importar que sea una exposición o un estudio analítico la acción a desempeñar, afirma como componente fundamental, el cultivar nuevos conceptos. “Mi vocación no es dirigir una empresa. Es trabajar por la educación”.

Por los últimos cinco años de su vida, se le ha otorgado el título de director general de la empresa editorial SM. A través del mismo, ha tenido la oportunidad de trabajar por el desarrollo de una mejor enseñanza para los niños y jóvenes ilustres del mañana.

Disfruta de su trabajo los encuentros de colegas en los que se intercambian inquietudes de la educación. Analiza que a pesar de poder tratarse de culturas con contextos desiguales, la problemática suele ser la misma, hecho que a su entender, refleja la semejanza de los individuos. “Me alegra ver el entusiasmo desplegado en el ambiente laboral. El modo en que los proyectos ayudan a los integrantes a marcar un desarrollo positivo con ilusión y resultados” resalta.

Mirando atrás los propósitos profesionales obtenidos, exclama como su máxima satisfacción el vínculo de amistad mantenido entre alumnos y profesor. Expresa que como ser humano dedicado a la asistencia didáctica no hay sensación más bonita que ser testigo del proceso en que ellos dejan de ser aprendices para convertirse en adultos y ser compañeros. “Quién considere que el profesor es el único encargado de aportar está equivocado” aclara mientras continua la idea con mirada capacitada. “Es un compromiso doble: con el alumno y contigo mismo. Con lo que quieres ser y que ellos sean”.

Tras compartir anécdotas significativas sobre distintos estudiantes que prefiere llamar amigos, concibo la incógnita que desde un principio llamó mi atención. Para alguien que ha logrado ser una guía de instrucción para muchos a su alrededor ¿Quiénes fueron su maestros a seguir? En primer lugar y sin pensarlo, reconoce a su padre, quién al igual que él, era maestro de escuela. Considera que gracias a la labor de servicio realizada por su antecesor, recibió el enfoque adecuado para moldearse como educador. “Crecí en un ambiente libre, donde predominaba el carácter cristiano y el interés educativo” explica con sentimiento de orgullo. Del mismo modo destaca a grandes ilustradores del colegio y la universidad, a quienes agradece su influencia y lecciones en el transcurso de su formación.

Gracias a la temática estudiada, ha publicado diversos libros de índole educativo. Entiende que a distintas escalas las tres grandes líneas que siempre trabaja son la organización escolar, los valores de la juventud y los desafíos que deben enfrentar las facultades académicas.

Destaca que disciplinar con metodologías extravagantes es innecesario. Si se utiliza un sistema que sea fácil de entender y cercano a la persona se logra una identificación. “Una cosa es enseñar. Otra despertar el interés y para mi, vale más desarrollar la habilidad personal” testifica.

Además de cooperar con la doctrina intelectual colectiva, el caballero con postura de altura, imparte su horario con elementos como la música y la lectura, a través de los cuales absorbe momentos de descansos. “Dedico mucho tiempo a las letras en todos sus aspectos” comenta entusiasmado. La literatura en general y los ensayos de sus compatriotas José Antonio Marina y Vicente Verdú son algunas de las composiciones que más prosigue.

Respecto a la rutina de viajes al extranjero, simplemente le fascina. “No es que me gusta, es que gusta mucho” exclama con picardía. Para estar al tanto de las diversas sedes de la firma en Latinoamérica, realiza un aproximado de dos visitas fijas en el plazo de un año. Desde que la entidad a la que representa abrió sus puertas en la República Dominicana mantiene un contacto cercano con sus ciudadanos. “Me encanta la isla. Son un pueblo completamente acogedor” emite con toque de elogiar.

La conversación continua, sin roces o intimidación y a medida en que el tiempo avanza, se va entiendo el camino recorrido por éste señor. Un sendero de paz que considera fuera de la cotidianidad en el cual se vislumbran direcciones que indican sabiduría y percepción. “La vida hay que fundamentarla con la innovación. Cada día un regalo, un punto de partida para actuar”.

Bien dicho reverendo. No hay un día normal, todos pueden ser especial.

Publicado en prensa por la revista Ritmo Social en texto de Natalia MQ - 14 de Junio, 2008.

sábado, 14 de junio de 2008

Viernes 13

Claro que cualquier persona se 'jamaquea' cuando nota que la fecha indica (¿O es más acorde "grita"?) Viernes Trece. Probablemente unos más que otros, pero todos se comentan a sus adentros si algo malo sucederá.

Quizás, algunos ni permiten que la inquietud les llegue al Superyó… no les preocupa las estupideces basadas en la superstición.

Otros, andan pensando ni en salir de la habitación… para qué tentar al destino en su día de mal humor.

Creo que hasta pena le tengo al trece. Por motivos que uno mismo ni entiende, el ritmo de rutina varía en este día… y si la impresora no sirve o el dinero es insuficiente y además te robaron al perro… el desgraciado Viernes 13 es el de la culpa.

No escribo para juzgar a quién recurre a la subjetividad de pensar que es la cifra la que afecta su caminar. Tampoco me siento en potestad de calificar el modo objetivo de aquellos seres que ni se inmutan frente a la suerte y la interpretación.

Hablo del viernes trece porque con buena, mala o ningún tipo de suerte, resulta ser un día evaluado en ser “fuera de lo normal”.

Y yo sin saber qué pensar…

Hoy, una amiga obtuvo la dicha de ser mamá, regalando a este mundo un nuevo bello motivo para querer ser más.

Hoy, dos amigos y sus familias fueron de negro a decir adiós a la persona que hace tres días planificaba celebrar en la noche del susodicho viernes trece, la dicha de un centenar de vida espectacular.

Hoy, un orgullo herido, una humildad olvidada y un atropello ruin denigran el talento humano de mentes inocentes cercanas a mi.

Hoy, una semilla de ilusión, una moral justicia y un valeroso ánimo intensifican el talento innato de mentes admirables cercanas a mi.

Hoy, un enérgico sacrificio muestra recompensa, prospera frutos y destella seguridad.

Se puede considerar las consecuencias de tu día como tu las definas. Si las fuerzas te las despedazaron y tu mundo está desdoblado… que el calendario asuma la responsabilidad.

Si tu día fue mil sonrisas, un buen halago y perfila con prosperidad… agradece tu viernes trece, compártelo con el resto a son de brindar una mano amiga de necesitada esperanza.

13 o no 13… las cosas suceden.

Y yo igual, sin saber si pensar que todo es "fuera de lo normal".

jueves, 12 de junio de 2008

Más burbujas - ¡Digo! - Visa para Turquía

Scene 1: Making the Turco.

Si dirigen sus ojitos (y al mismo tiempo mueven el cursor de la computadora) un poquito hacia abajo, verán en dirección izquierda o más al sur, que la última publicación antepuesta a la que ahora escribo, es el texto que menciona algo en turco, unas cuantas tarjetas que sirven de dinero y alguno que otro recuerdo guardado con tanta importancia, que fue la experiencia que promovió mi inspiración de relatarlo.

La idea, surgió de mi cerebro en uno de mis años que apellido con la universidad. Tengo una leve noción que fue en el transcurso de una muy aburrida o nada fructuosa clase sin profesor que mi mente se enganchó la cartera y se fue a pasear. Al parecer, entre especulaciones de un futuro, miradas fijas al reloj y conjeturas en idioma de acertijos, “Miss Mente” caminó hasta la avenida en la que se vislumbra la puerta del colegio en el que estudié. Dentro de la ligera anécdota que tengo sobre ese día (y que anteriormente especifiqué) recuerdo perfectamente la reacción de mi cuerpo cuando captó el concepto. El codo de mi brazo derecho abandonó su posición de bastón para mejillas y junto a todo el resto de mi percha, se emocionó.

En las últimas – y más utilizadas – páginas de la cátedra, empecé a plasmar sencillas intuiciones de “cafetería” que completaron su sentido en una porción próxima a diez líneas.

Tomando notas en la misma cátedra y otras más, los semestres en la universidad se fueron reduciendo, hasta llegar a un tiempo que refleja un paso más cerca de la actualidad.

Traspasando los días de la rutina en la construcción de moldes para escritos de técnica objetiva, “Señora Mente” (los hechos indican que creció) tocó desesperadamente el extremo de una neurona para exigirle un desahogo de aspecto personal.

De este modo y aquí sí que no recuerdo cómo, Turquía y el colegio resurgieron en concepto. Cuando por fin abrí la hoja sistemática de la computadora para hablar sobre el recuerdo, mi pana, Mrs. Mente, me hizo pensar en el boceto trazado en un ayer, cuando todavía la borla del birrete esperaba en fila su momento de pasar al otro lado del sombrero licenciado.

Lo escribí en un estimado progresivo tan acelerado que ni lo podía creer. Pero al destino del turco aún le faltaba senderos por recorrer…

En otro espacio, continuaré la aventura vivida por el escrito antepuesto y la odisea atravesada para su difusión.

martes, 10 de junio de 2008

OH! Burbuja

Columna Mujer OH! Sábado 7 Junio, 2008.
Un artículo de opinión muy especial... para mi. Gracias a todas aquellas personas que me hicieron saber su apreciación por el escrito. De manera muy personal, es una grata satisfacción que se hayan sentido identificados. Espero que por igual, sea una iniciativa en sus vidas para evaluar cuantos momentos "priceless" hemos dejado pasar y así, empezar a valorarlos. Disfruten el resultados de dos cinco pesos.

Viaje a Turquía por RD$10.00

Dentro de las mil y una curiosidades - por no decir adversidades - con las que me topé en los años de bachillerato, hay dos en este texto que debo destacar. La primera se basa en el descubrimiento de una profunda admiración hacia los anuncios publicitarios de las tarjetas Mastercard, los cuales aún en la actualidad, aplaudo por su innata creatividad de presentar el listado de productos que el dinero puede y no puede comprar. La segunda, puede parecer en principio un derivado de la glotonería, pero va más allá que cometer el segundo pecado capital. Devorar los deliciosos, hasta el extremo, turcos de queso a la hora de la merienda, mantienen en mi memoria un lugar permanente que ni siquiera libre de impuestos, me permito negociar.

Faltando cinco para los treinta minutos de las diez de la mañana, nuestras miradas se centralizaban en las agujas del reloj que por efecto de hambre y desesperación, parecían tomar vida y autodenominar el mundo con su lentitud. Sonaba el timbre que fungía el papel de la campana y ya las papeletas con valor de una decena – que para esa época todavía prevalecían - estaban en mano. Los empujones y desorden de la fila para llegar a ellos eran olvidados desde el instante que nuestros dedos y sistema olfativo los reconocían. Su forma triangular distinta al resto de las “nutritivas” degustaciones de la cafetería además de su sabor a pura comida chatarra, nos brindaban de modo sencillo, momentos de exquisitez.

Lo irónico de la situación, es que el conjunto apetitivo por el que día a día gran parte de los ochocientos estudiantes del colegio se disputaban para obtener, no pertenecían a los otros muy populares turcos que un señor Papo lograba vender en variadas zonas de la ciudad. Para los seguidores del primer modelo – en el cual descansa mi inclinación – este factor agregaba un toque extra de diversión al momento del paladar. Una especie de competencia sin malicia surgía entre los “Pro – Papo” y los “Pro – nuestros” que incluía comparaciones, análisis del diseño físico y justificaciones de cada sazón.

Convenientemente para la salud nutricional, han pasado más años de lo que mi mente y cuerpo quisieran desde el último día que probé uno de ellos. Llegué a esta melancólica conclusión cuando percaté que mi hermanita - ya no tan “ita”- se encuentra en su año de graduación. Entonces, empecé a dialogar con mi mente e imaginación sobre si ella junto a sus amigas, tuvo la satisfacción de vivir esos pequeños tiempos de deleites en el recreo. Es ahí que enlazo dos de las características de mi bachillerato: Cómo una mezcla de harina, aceite y queso me regaló un viaje diario a Turquía por $10 pesos a través del cual, nosotras olvidábamos los problemas o por lo menos, los aliviábamos con desahogos de risas, quejas y soluciones hipotéticas.

Fueron etapas que en el momento en que se viven, lo que más desea el cuerpo vestido de rebeldía es que finalicen y ya se “sea grande”. Después, cuando se deduce que la realidad es pintada con acuarelas y que no acepta la rebeldía, entiendes que media hora de descanso, una esquina del patio y una suma de diez pesos permiten una escapada que no tiene precio.

Publicado en prensa por la revista OH! Magazine en texto de Natalia MQ - 7 Junio, 2008.

Link
http://listin.com.do/app/oh_article.aspx?id=61577

martes, 3 de junio de 2008

Caricatura Burbujosa

I just love this comis strip. Siempre encuentra una nueva y bella forma de expresar lo que significa el amor... amazing.

Bienvenido a mi burbuja ¿Traes contigo una aguja?